recuerdos hermosos

Salir contigo, reír hasta llorar, llorar hasta reír, hermosos recuerdos que terminaban con un beso, un beso robado, uno que según tu era un accidente, que accidente tan emocionante y tan tierno , sentir tus labios en los míos como muestra de cariño  y tus manos simplemente delicadas y sencillas  con las que me transportabas a nuestro mundo , una película de amor recreada en un estacionamiento con el mismo final de siempre , el beso que nos robaba el sueño y nos sacaba varias sonrisas en medio de la noche. Volverme a ver, eso me dijiste que lo único que querías era volverme a ver y que tenias miedo que no pase, miedo a que me castigaran por las mentiras piadosas que decía para estar contigo, a la final no pasaba nada, todo era una exageración que sacaba a flote nuestros sentimientos de angustia y miedo a no volver a vernos.El latido de mi corazón se aceleraba cada vez que me mirabas , no sabia que hacer, que intimidante pero a la vez que hermosa mirada, que me llenaba de felicidad. Pasamos todas las pruebas juntos , en cuatro días hablábamos mas que en un mes, hablábamos como si el mundo se fuera a acabar y sentíamos la necesidad de estar comunicados a cada momento, una llamada tuya me quitaba el aliento por mas de tres horas, por que siempre me decías cosas hermosas que sabias que me llenarían de ilusión y emoción.Ahora lo único que me queda de ti son tus mensajes, la prueba de tus mentiras, los veo y las lagrimas brotan de mis ojos una por una caen , cada ves mas rápido, la cantidad de lagrimas es proporcional a los recuerdos que tuvimos juntos, y siempre, después de recordar, de pensar, llego a la misma pregunta.¿Por que dijiste que me querías si no era cierto?No eran necesarias todas tus mentiras , yo nunca te obligue a que me digas tantas cosas, espero no estés equivocado, por que de verdad me hiciste mucho daño y no me creo capas de perdonar y actuar como si nada a pasado, no puedo creer que sea posible tanta mentira.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El veredicto final

Ella era..

Las máscaras y el poder divino